Libertad Leblanc

Libertad María de los Ángeles Vichich (n. Guardia Mitre, 24 de febrero de 1936),conocida por su seudónimo Libertad Leblanc, es una actriz argentina. Filmó treinta películas en la industria cinematográfica argentina entre 1960 y 1989.

Leblanc fue un símbolo sexual de los años sesenta y setenta, apareciendo en numerosas películas en escenas de desnudez y contenido sexual mayormente ingenuo. Una de sus películas más recordadas fue una de las primeras en su carrera, Acosada, de 1964.

Algunas de sus películas fueron controvertidas, como La endemoniada, de 1968, que contiene escenas de horror y vampirismo, con desnudez explícita. Leblanc también actuó en la serie de televisión Naná y en versiones de TV de las vidas de Lola Montez y Lady Hamilton.

Su padre, un administrador de campos, murió en un confuso episodio policial cuando Libertad aún no había cumplido un año de edad. Su madre volvió a casarse, y Libertad pasó su adolescencia como pupila en un colegio de monjas, el Colegio María Auxiliadora, en la ciudad de Trelew. Libertad era una alumna díscola y rebelde, y fue expulsada cuatro veces del colegio. Muy joven aún, se casó con el empresario teatral Leonardo Barujel, con quien tuvo a su única hija Leonor. El matrimonio duró apenas un par de años, y Leblanc no ha vuelto a contraer matrimonio desde entonces.

Ya retirada de los estudios de filmación y de los escenarios, Leblanc, «la diosa blanca de la sensualidad», transcurre actualmente sus días entre Argentina, en España (donde tiene dos casas) y en Suiza, donde viven su hija Leonor y su nieto.

Libertad era una mujer decidida. A comienzos de la década de 1960, habiendo realizado sólo papeles menores en películas y espectáculos teatrales, aceptó la invitación de un periodista venezolano para asistir a un festival de cine en Caracas.

Al borde de la piscina del hotel, mientras invitados y periodistas le dedicaban toda la atención a la diva argentina Graciela Borges, Libertad se quitó el vestido, exponiendo su cuerpo blanquísimo y escultural en pequeñísima bikini amarilla a lunares. Los periodistas se arremolinaron alrededor de aquella despampanante rubia desconocida.

El repentino salto a la notoriedad le significó su primera película protagónica, La flor de irupé, en la que realizaba el primero de los muchos desnudos que caracterizarían su carrera, y que resultó un éxito de taquilla.

Su rivalidad con Isabel Sarli ―el mayor símbolo sexual del cine argentino― fue notoria en la década de 1960. Eran las dos figuras máximas del cine erótico y al mismo tiempo el contraste entre ambas, en apariencia y en personalidad, en la pantalla y fuera de ella, no podía ser mayor: Isabel Sarli era morena, trigueña, de generosas formas y atributos naturales. Libertad Leblanc, por su parte, se había mejorado los pechos mediante cirugía, había teñido su cabello de rubio platino, y mantenía su distintiva piel blanquísima evitando exponerse al sol. Sarli era tímida y algo ingenua, y daba una imagen pública sencilla y campechana. Sus películas son en su mayoría melodramas y comedias. En contraste, Leblanc era desinhibida y astuta, y daba una imagen pública de vampiresa. Su filmografía incluye policiales y thrillers.

La Sarli, como solían llamarla, era, como actriz, enteramente un producto de Armando Bó; ya que el realizador argentino fue para ella padre, marido, representante, productor y director, simultáneamente. La Leblanc, como solían llamarle también, estaba en cambio acostumbrada desde joven a abrirse camino por sí misma. Fue una auténtica «self-made woman» (‘mujer autocreada’) de su tiempo: discutía con los productores, los directores y los distribuidores, era su propia representante y coprodujo casi todas sus películas ―en una época en que ninguna mujer lo hacía―, encargándose casi siempre de la distribución y promoción de sus filmes. Al respecto, un productor mexicano, con quien Leblanc realizó ocho películas, manifestó una vez a los medios que «Libertad Leblanc, para hablar de negocios, tiene bigotes».

De hecho, fue la propia Libertad Leblanc quien instaló la rivalidad entre ella y la Sarli. A fin de promocionar su primera película, La flor de irupé, sugirió un afiche de promoción con un desnudo en blanco y negro, y la leyenda «Libertad Leblanc, rival de Isabel Sarli». Aunque Isabel no dijo nada, Armando Bó, hecho una furia, acusó a Leblanc de estar utilizando arteramente la fama, ya internacional, de Isabel Sarli. 

1 Espectáculos en los que participó