Donde terminan los rieles

Tato Cayón nos presenta esta tragedia contemporánea situada en un baño abandonado devenido en habitación, en alguna estación de tren. La historia desmenuza a fondo los vínculos que se establecen en estado de absoluta supervivencia y resume una ciudad violenta que acosa y discrimina. Rulo y Rengo, dos amigos vendedores ambulantes, deben someterse a la vergüenza amarse por fuera de los cánones de la heteronorma en una sociedad que margina lo que teme y teme lo que desconoce. El sueño será siempre salir a lucharla día a día hasta alcanzar una buena pilcha y escapar hacia donde terminan los rieles, y se puede pensar en un hogar.