(Fragmentos de identidad e imigración en la vida de la escritora húngara Agota Kristof)
El espectáculo es un puente entre el espectador y la autora, una reflexión sobre el arte de escribir, un homenaje a la literatura, donde los acontecimientos están unidos entre si con la idea del viaje. Un viaje real en el espacio, pero también un viaje dentro de sí misma. El tema del viaje, como metáfora del cambio, de crisis, donde en cada etapa hay una perspectiva distinta sobre temas dolorosos, multiformes, como la infancia, la frontera, la identidad, la memoria.
En el ritual todas las actrices son Agota, en forma conjunta y separada, como colores de la misma persona; o quizás ninguna, para desaparecer y transformarse en espacios, personajes, paisajes, un mundo donde se alternan los protagonismos.
En el espectáculo, música y cantos acompañan el viaje. Son cantos antiguos y modernos que conviven en Agota; como en los sueños, donde todo se mezcla, de ese modo, se confirma que el pasado no es solo un recuerdo. Así la puesta en escena se acerca a nosotros, como nuestros sueños, con fantasía y libertad, opresiones y pesadillas que nos precipitan dentro un ritual… Y no solamente eso, sino que también nos provoca, nos incita como Alicia a ir del otro lado del espejo.
Clasificaciones: Teatro