Darío Niccodemi

Dramaturgo y director teatral italiano, nacido en Livorno en 1874 y fallecido en Roma en 1934. Autor de una obra dramática de gran sencillez, caracterizada por su facilidad para llegar al público burgués de las primeras décadas del siglo XX, en su faceta de director teatral desempeñó, en cambio, un papel fundamental a la hora de introducir en la escena italiana la principales innovaciones vanguardistas del teatro contemporáneo. Tanto fue así, que al trabajo escénico de su prestigiosa compañía se debió el primer montaje histórico, en 1921, de Sei personaggi in cerca d'autore (Seis personajes en busca de autor), del dramaturgo siciliano Luigi Pirandello, dos años antes que alcanzara renombre universal merced al montaje de Pitoëf en París. Impulsado desde su temprana juventud al mundo de la escena, se hallaba en Buenos Aires cuando se dio a conocer como dramaturgo, por vía de dos piezas teatrales escritas en lengua castellana: Duda suprema y Por la vida. Posteriormente regresó a Europa y se instaló en París, donde eligió el francés como vehículo de sus nuevas entregas dramáticas, entre las que destacan las tituladas Suzeraine (Soberana, 1908), Le réfuge (El refugio, 1911), L'aigrette (La cresta, 1912) y Les requins (Los tiburones, 1913). Ya introducido en los principales cenáculos de la escena europea de comienzos del siglo XX, Dario Niccodemi retornó a su Italia natal para estrenar, en su lengua vernácula, algunas de esas piezas teatrales que le convirtieron en una celebridad dentro del teatro burgués de la época, como L'ombra (La sombra, 1915), La nemica (La enemiga, 1916) y La maestrina (La maestrilla, 1918). A grandes rasgos, el teatro escrito por Dario Niccodemi en esta época basaba su éxito en la asombrosa habilidad mostrada por el dramaturgo de Livorno a la hora de integrar, en una misma obra, los ingredientes preferidos por el gusto de las clases medias, sin que la dudosa combinación de elementos humorísticos y patéticos supusiera un obstáculo para su acreditado dominio del medio escénico. Posteriormente, Dario Niccodemi acrecentó su producción teatral con varios dramas que también merecieron los aplausos de la crítica y el público de la época. Entre estas piezas postreras de su obra dramática, conviene recordar las tituladas La casa segreta (1923), La madonna (1927) y El príncipe (1929). Fuente: texto extraído de http://www.mcnbiografias.com/